Existen una serie de preguntas que, dependiendo de cómo nos encontremos anímicamente en ese momento, nos costará más o menos responder. Y, aunque te cueste creerlo, aquí la salud mental tiene mucho que ver.

Todos nos hemos sentido así alguna vez, pero ¿qué pasa cuando dejamos de disfrutar las cosas de la vida y tenemos la sensación de ir enfadado por la vida? Sabemos qué hacer cuando nos duele una muela, cuando nos duele un pie o cuando nos duele el estómago. Pero, ¿qué pasa cuando te duele la vida?

No queremos ponernos muy espirituales pero seguro que alguna vez has sentido que estás perdiendo la sonrisa, que te cuesta descansar o concentrarte, o incluso si tu hijo suspende sus asignaturas y no sabes cómo reconducirlo. ¿A quién acudimos en ese momento?

Normalmente, las opciones que se nos pasan por la cabeza son: pensar que se pasará solo porque es una mala racha, pedirle consejo a algún amigo, buscar en Internet o incluso acudir al médico de atención primaria. Pero nunca, o en muy pocas ocasiones, pensamos en que esa ayuda o ese malestar, está relacionado con nuestra salud mental. Además, aunque no lo creamos, la pandemia por Covid-19 también ha tenido consecuencias psicológicas sobre nosotros.

La importancia de cuidar nuestra salud mental

La salud mental engloba todo lo relacionado con nuestro bienestar emocional y cómo este influye de forma bidireccional en nuestro entorno: desde nuestro trabajo hasta en las relaciones sociales con la familia o amigos.

Al igual que una muela picada se puede solucionar con un empaste y si la descuidamos, probablemente, nos la tengan que sacar o si descuido un esguince puede convertirse en una lesión grave, si alargamos una situación de tristeza o descontento, podemos caer en una depresión. O si no aprendemos a gestionar el estrés, podemos acabar teniendo crisis de ansiedad. 

Nuestras emociones son como una bola de nieve, cuanto más tiempo las dejamos, mayor será su tamaño. Por ello, cuanto más arraigado esté el problema, más difícil será desprendernos de él. ¡Cuida tu salud mental!